Nos comparte sus palabras la hermana Silvia Cabrera, EcoFranciscana de la congregación MFVE:
El 28 y 29 de abril de 2024, realizamos los primeros diálogos territoriales en Uruguay, en las ciudades de Tacuarembó y Rivera (Uruguay).
En Tacuarembó nos reunimos en la Parroquia de la Cruz. Allí encontramos personas muy concientizadas y comprometidas con el tema del Acuífero Guaraní y las implicaciones sociales y políticas de esta realidad. Consideramos que esto se debe al camino recorrido junto al anterior Obispo Julio Bonino (Marcha en defensa del Acuífero Guaraní, año 2015).
En Rincón de la Aldea tuvimos la oportunidad de dialogar con tres integrantes descendientes charrúas del colectivo “Agua es vida”, que están organizados en comunidad con una opción de vida acorde a sus valores indígenas –forma de trabajar, de curarse, de establecer alianzas, pertenencia a la tierra y cuidado de ella-. En la defensa de sus derechos han investigado y entrado en relación con la Academia y con muchas personas y grupos que trabajan a favor de la naturaleza.
En Rivera, nos reunimos en la Parroquia San Pedro. Esta ciudad, al ser fronteriza con Brasil, tiene una identidad específica donde dos culturas conviven en su diario vivir.
Las personas que concurrieron a la reunión estaban en conocimiento de la presencia del Acuífero en su ciudad, tanto de los beneficios como de los malos usos del mismo. Algunas de ellas se sentían indignadas y descorazonadas por la mala gestión estatal de este importante recurso natural. Otras, en cambio, esperanzadas en el trabajo en equipo y en los pequeños pasos que se han dado. Nos dejaron un hermoso legado: “Hay que tomar mucho mate con la gente” como decía el Padre Cacho + (sacerdote uruguayo).
